Cuida tu piso vinílico como un tesoro!
Los pisos vinílicos son la sensación del momento: versátiles, fáciles de instalar y ¡qué tal lucen! Pero para que duren muchos años como nuevos, necesitan un poquito de cariño. ¡Sigue estos consejos y tu piso siempre estará impecable!
Limpieza diaria: un hábito saludable
- Aspira o barre: Todos los días, dale una pasada rápida con la aspiradora o la escoba. Esto evita que la suciedad se pegue y hace que las limpiezas profundas sean más fáciles.
Limpieza semanal: ¡a fondo!
- Mopa húmeda: Una vez a la semana, pásale una mopa húmeda con agua tibia y un poquito de detergente suave. ¡Nada de frotar con fuerza! Y recuerda, los pisos claros necesitan un poco más de atención.
Manchas: ¡a combatirlas!
- Reacciona rápido: Si se te derrama algo, ¡no te espantes! Límpialo de inmediato con un paño suave y detergente neutro.
- Consejos para manchas comunes:
- Aceite, vinagre o limón: Límpialos rápido para evitar manchas.
- Tinta, tomate, sangre: Un poco de alcohol diluido hará el truco.
- Rotuladores: El alcohol blanco es tu mejor aliado.
- Óxido: Usa una esponja especial para óxido y enjuaga bien.
5 tips para proteger tu piso:
- Protege las patas: Ponles fieltro a las sillas y muebles pesados.
- Olvídate de la goma: La goma puede manchar tu piso.
- Alfombras en la entrada: Evita que la calle entre a tu casa.
- Productos suaves: Usa detergentes naturales o neutros.
- Cuidado con el calor: Mantén las fuentes de calor lejos de tu piso.
¡Lo que nunca debes usar!
- Productos abrasivos: ¡Olvídate de ellos!
- Jabón negro: Demasiado fuerte para tu piso.
- Acetona y disolventes: ¡Prohibido!
- Cera y barniz: No los necesitas.
- Productos a base de aceite: ¡No!
- Limpiadores a vapor: Pueden dañar tu piso.
¡Con estos consejos, tu piso vinílico estará siempre radiante!